Parashá No.14 - Vaerá / Y Aparecí
Shemót / Nombres / Éxodo 6 : 2 – 9 : 35
2 Elohim habló a Moshé, El le dijo: "Yo soy YAHWÉH. 3 Yo me aparecí a Avraham, Yitsjak y Yaàkov como El Shaddai, no me hice conocer a ellos por Mi Nombre, Yud-Heh-Vav-Heh [YAHWÉH]
Conocer a Yahwéh
Por el Rab. Ntanel Gomescásseres
Shemót / Éxodo 6 :
2 Elohim habló a Moshé, Él le dijo: "Yo soy YAHWÉH. 3 Yo me aparecí a Avraham, Yitsjak y Yaàkov como El Shaddai, no me hice conocer a ellos por Mi Nombre, Yud-Heh-Vav-Heh [YAHWÉH] 4 También con ellos Yo establecí mi Pacto de darles la tierra de Kenaán, la tierra donde ellos erraron de aquí para allá y habitaron como extranjeros. 5 Además, Yo he oído el gemido del pueblo de Israel, a quienes los Egipcios tienen en esclavitud; y Yo he recordado mi Pacto.
6 "Por lo tanto, di al pueblo de Israel: 'Yo soy YAHWÉH. Yo los libraré del trabajo gravoso de los Egipcios, los rescataré de la opresión de ellos, y los redimiré con brazo extendido y con grandes juicios. 7 Yo los tomaré como mi pueblo, y Yo seré su Elohim. Entonces ustedes conocerán que Yo soy YAHWÉH, quien los liberó del trabajo gravoso de los Egipcios. 8 Yo los traeré a la tierra que Yo juré dar a Avraham, Yitsjak y Yaàkov – Yo se las daré como su herencia, Yo soy YAHWÉH.
9 Moshé dijo esto al pueblo de Israel. Pero ellos no querían escucharle, porque estaban tan desanimados y la esclavitud de ellos era tan cruel.
10 YAHWÉH dijo a Moshé: 11 "Entra, di a Faraón, rey de Egipto, que deje al pueblo de Israel salir de su tierra." 12 Moshé dijo a YAHWÉH: "Mira, el pueblo de Israel no me ha escuchado; así que ¿cómo me escuchará Faraón, pobre orador que yo soy?" 13 Pero YAHWÉH habló a Moshé y a Aharon y les dio órdenes referentes a ambos el pueblo de Israel y Faraón rey de Egipto, de sacar al pueblo de Israel fuera de la tierra de Egipto.
En este pasaje, podemos aprender muchas cosas.
Igual como decíamos en el comentario a la parashá Shemót, si leemos ligeramente, únicamente recibiríamos la enseñanza histórica, de cómo fueron los inicios de nuestra liberación de Egipto.
Pero, si miramos con un poco de profundidad, podemos extraer enseñanzas para nuestra vida hoy.
Para comenzar, miremos el comienzo de este pasaje:
2 Elohim habló a Moshé, Él le dijo: "Yo soy YAHWÉH. 3 Yo me aparecí a Avraham, Yitsjak y Yaàkov como El Shaddai, ¿no me hice conocer a ellos por Mi Nombre, Yud-Heh-Vav-Heh [YAHWÉH]
"Yo soy YAHWÉH”
Esa afirmación del Eterno, no la podemos tomar tan a la ligera.
Esa afirmación, no puede quedar encerrada en solo tres palabras.
Esa declaración, va mucho mas allá que eso.
El Eterno, le está diciendo a Moshé quien es Él, realmente, en su esencia.
Se da a conocer delante de Moshé, de la manera como quiere que todos sus hijos lo conozcamos.
Le está diciendo a Moshé, que hasta ahora lo había conocido de una manera parcial, y de esa manera parcial es que la inmensa mayoría de nosotros lo conoce.
Cada uno de nosotros se ha hecho una imagen, de lo que creemos que Yahwéh es.
Para unos, Él es nuestro sanador.
Para otros, Él es el Todopoderoso.
Para otros, Él es Proveedor.
Siempre nos quedaremos cortos si lo limitamos a ciertos atributos, que si bien es cierto Él los posee, no podemos negar que Él es mucho mas que eso.
Por ejemplo, muchos de nosotros no sabemos lo que Él espera de nosotros.
Cuales son sus propósitos con nosotros como pueblo, y con el mundo en el cual vivimos.
Muchos creemos que lo que El Eterno espera de nosotros, son nuestros diezmos, ofrendas y primicias.
Que con cumplir con eso, ya le estamos agradando.
Tenemos que entender, que esa es solo una parte de nuestro servicio a Él.
Otros piensan, que con guardar Shabat, comer kosher, celebrar las fiestas, utilizar kipá y talit, ya lo tenemos súper contento.
Estas maneras de pensar, vienen del desconocimiento de lo que realmente Él es.
Miremos lo que Él dice :
3 Yo me aparecí a Avraham, Yitsjak y Yaàkov como El Shaddai, no me hice conocer a ellos por Mi Nombre, Yud-Heh-Vav-Heh [YAHWÉH]
Aquí está mencionando a nuestros tres patriarcas, esos grandes ejemplos para nosotros.
Ellos no lo conocieron en Su Plenitud, sino parcialmente.
Pero, hay que entender el tiempo en el cual ellos vivieron, recién comenzaba el conocimiento de Elohim en la tierra.
Aún no existía la Toráh.
Hoy en día, no podemos tener las mismas disculpas.
Tenemos la Toráh desde hace 3.500 años, y los eventos que han transcurrido, los que están registrados en la Tanak y en el Brit Hadashá, y los que suceden aún en nuestros días, nos tienen que llevar a un conocimiento mucho mas profundo, de cual es la voluntad agradable y perfecta del Eterno.
Ahora bien, eso no se logra únicamente leyendo.
Tiene que haber una relación intima con Él.
Esa relación, tiene que estar basada en la oración, el ayuno, la adoración continua.
En estas áreas, tenemos que reconocer, que cuando llegamos al Judaísmo Mesiánico, retrocedimos bastante.
Ya no oramos, sino es con el Sidúr.
Ya no ayunamos, sino es en Yom Kippúr.
Ya hasta en algunas sinagogas mesiánicas, han suspendido la adoración y la alabanza.
Para todo eso, se tiene la disculpa perfecta : “eso es evangélico”.
Salgamos rápido, de esos errores de apreciación.
Comencemos a “conocer” (no nos olvidemos la connotación que tiene esta palabra, en el lenguaje de la Toráh) a Elohim, tal como Él es.
Cada de uno de nosotros, tome como ejemplo a cualquier persona de nuestra comunidad.
Decimos que todos nos conocemos, los unos a los otros.
Pero, que conoces tú de Fulano de Tal?
Conoces su nombre, el de su esposa, el de sus hijos.
Sabes que auto tiene, donde vive, cual es su profesión, y en que empresa trabaja.
Eso será conocer a alguien, plenamente?
Creo que no.
Sabes quien conoce en toda su plenitud, a Fulano de Tal?.
Su esposa, sus hijos, su familia, su papá, su mamá, sus hermanos.
Ellos saben todo lo que nosotros sabemos, pero, saben también muchas cosas mas:
Que si le gusta el cine, o no, y que películas son sus favoritas.
De que equipo es hincha.
Cuales son sus comidas favoritas.
Su loción favorita.
Si le gusta acostarse tarde, levantarse temprano.
Si le gusta durar bastante en la ducha, cantar en el baño.
Hacer locha los domingos.
Ellos saben, por quien él va a votar en las próximas elecciones.
Cuales son sus sueños, y sus pesadillas.
Saben lo que él ama, y lo que él odia.
Cuales son sus metas en la vida.
Lo que le gusta leer.
Su emisora favorita.
En fin, desde las cosas mas grandes, hasta las mas pequeñas, ellos lo saben, porque tienen intimidad con él.
Es a ese tipo de intimidad, que Elohim quería llevar a Moshé, y también hoy nos hace esa misma invitación.
4 También con ellos Yo establecí mi Pacto de darles la tierra de Kenaán, la tierra donde ellos erraron de aquí para allá y habitaron como extranjeros.
Este pasúk/ versículo, nos dice las consecuencias de vivir una vida donde no haya una relación sana con Elohim.
Nos la pasamos errantes, de aquí para allá.
En ningún lugar nos sentimos bien.
En todas las sinagogas adonde vamos, nos sentimos extranjeros.
Como decían nuestros abuelos : “el mal no está en la sabana....”.
Cuando hay una buena relación con Elohim, entonces nuestra vida se llena de shalom, porque sabemos que lo estamos agradando con todo lo que hacemos.
5 Además, Yo he oído el gemido del pueblo de Israel, a quienes los Egipcios tienen en esclavitud; y Yo he recordado mi Pacto.
Este pasúk, me hace recordar otro en el Brit Hadashá :
Romaním /Romanos 8 :
26 Similarmente el Espíritu mismo nos ayuda en nuestras debilidades; pues nosotros no sabemos orar de la manera que debemos. Pero el Espíritu mismo implora por nosotros con profundos gemidos indecibles; 27 y el que escudriña los corazones sabe exactamente lo que el Espíritu está pensando, porque sus ruegos por el pueblo de YAHWÉH van de acuerdo con la voluntad de YAHWÉH.
Que hermoso, es encontrar la misma enseñanza a lo largo de todas la Sagradas Escrituras.
6 "Por lo tanto, di al pueblo de Israel: 'Yo soy YAHWÉH. Yo los libraré del trabajo gravoso de los Egipcios, los rescataré de la opresión de ellos, y los redimiré con brazo extendido y con grandes juicios.
Aquí, en estos pasukím, podemos ver un comienzo de cual es esa voluntad del Eterno para nosotros.
Todos sabemos, lo que simboliza Egipto en la Toráh.
Simboliza, el mundo y sus deseos.
Cuando miramos las cosas de esa manera, entonces nos damos cuenta que seguimos estando en Egipto.
Que nuestros sueños, son los mismos sueños que todo el mundo tiene.
Que nuestras metas, son iguales.
Que nuestros afanes, son iguales.
Que trabajamos en lo mismo, que todo el mundo trabaja.
Que estudiamos lo mismo, que todo el mundo estudia.
Que somos igualitos.
Que en nada nos diferenciamos, del mundo que nos rodea.
Es a todo eso, a lo que Elohim se refiere cuando dice :
“Yo los libraré del trabajo gravoso de los Egipcios, los rescataré de la opresión de ellos, y los redimiré”
Solo cuando nos dejemos guiar por Elohim – y eso solo se logra teniendo intimidad con Él – entonces, es cuando Él dirá:
7 Yo los tomaré como mi pueblo, y Yo seré su Elohim.”
Queremos ser parte de Su pueblo.
Pero, a nuestra manera,
Haciendo la voluntad del mundo, y no la de Elohim.
Decimos conocer Su Voluntad, pero aún andamos igual que todo el mundo que nos rodea.
Cuando seamos distintos en TODO con respecto al mundo en el cual vivimos, entonces Él nos tomará como Su Pueblo, y como consecuencia:
Entonces ustedes conocerán que Yo soy YAHWÉH, quien los liberó del trabajo gravoso de los Egipcios. 8 Yo los traeré a la tierra que Yo juré dar a Avraham, Yitsjak y Yaàkov – Yo se las daré como su herencia, Yo soy YAHWÉH.
Muchos de nosotros los siervos del Eterno, los que predicamos Su Palabra, muchas veces podemos desanimarnos.
Porque predicamos y predicamos, y no se ven los frutos en nuestros oyentes.
No se observan cambios en ellos.
Como si lo que escucharan, les entrara por un oído, y les saliera por el otro.
La razón principal de esto, la encuentro en el pasúk siguiente:
8 Moshé dijo esto al pueblo de Israel. Pero ellos no querían escucharle, porque estaban tan desanimados y la esclavitud de ellos era tan cruel.
No hay que ser muy espirituales, ni muy sabios, para darnos cuenta de la esclavitud en que andamos.
Pero, para colmo, muchos ni siquiera vemos eso.
Con versículos famosos, como:
“Y conoceréis la verdad y la verdad nos hará libres”, nos lavan el cerebro.
Caemos en la trampa, de creer que ya somos libres.
Mira a tu alrededor, y hazte la pregunta:
Libre, de qué?
Queremos que el mundo a nuestro alrededor nos escuche, y siga nuestras enseñanzas.
Pero, fijémonos en este pasúk :
10 YAHWÉH dijo a Moshé: 11 "Entra, di a Faraón, rey de Egipto, que deje al pueblo de Israel salir de su tierra." 12 Moshé dijo a YAHWÉH: "Mira, el pueblo de Israel no me ha escuchado; así que ¿cómo me escuchará Faraón, pobre orador que yo soy?"
Si nosotros no escuchamos al Eterno cuando nos habla a través de Su Palabra, como vamos a esperar que el mundo si lo escuche?
Quiera Elohim, que este pequeño comentario, sirva para que reflexionemos en cuanto a nuestra situación espiritual actual, como sus hijos, como su pueblo.
Podemos seguir siendo tercos, obstinados al máximo, tratando de hacernos los locos, para no cumplir con la voluntad de Yahwéh.
Por el hecho de ser nosotros desobedientes, no es que Él va a cambiar Su Voluntad.
No hay excusa que valga.
Su Voluntad, seguirá siendo la del ultimo pasúk :
13 Pero YAHWÉH habló a Moshé y a Aharon y les dio órdenes referentes a ambos el pueblo de Israel y Faraón rey de Egipto, de sacar al pueblo de Israel fuera de la tierra de Egipto.
Shabat Shalom.
Rab. Ntanel Gomescásseres
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